Evite abrir archivos adjuntos de mensajes de correo
electrónico enviados por personas que no conozca, a menos que sepa con certeza
qué son dichos datos adjuntos. El remitente puede no ser consciente de que
contienen virus.
Realice copias periódicas y
frecuentes de nuestra información más importante.
Mire en la barra de direcciones y compruebe que las primeras letras de la dirección de la página son “https”, normalmente es únicamente “http”. De modo que la información viaje cifrada y así evitar que un atacante pueda capturar los datos.
Restauración del sistema, vuelve a un estado previo en el que el sistema funcionara correctamente.
Utilice contraseñas seguras, que no sean fáciles de adivinar e intenta no repetirlas.
En las redes sociales, limite el acceso de la información que comparte a personas desconocidas o conocidas.
En su correo, usa el filtro antispam.
Manténga actualizado tu equipo, tanto el Sistema Operativo como cualquier aplicación que tengas instalada.
Cree diferentes cuentas de usuario en su equipo, por lo menos tenga dos de administrador.
Tenga instalados programas de seguridad o limpieza del equipo.